La caridad fraterna ayuda extraordinariamente a orar de verdad, con total sinceridad. +http//abandono.com+.
La persona egoísta, encerrada dentro de sí misma,
incapaz de dialogar, de aceptar una crítica, de darse, incapaz de
amistad, siempre tiene muchas dificulades para abrirse a Cristo en
una oración auténtica. El que confía en los demás acoge y acepta
ser acogido en una relación de amistad, y de este modo tiene
capacidad para establecer una relación cital con el Señor. Es que
la oracióne s ante todo una relación personal con Dios. Por eso
nuestra capacidad de orar está en proporción con jestra capacidad
de darnos al Señor. Pedro Finkler
No hay comentarios:
Publicar un comentario